La lista de requerimientos no es larga ni difícil de cumplir, pero lo claro es que todos esos puntos deben ser cubiertos con antelación. Entre el momento en que se publica la convocatoria y se cierra la ventana para colocar las órdenes de compra, suele haber un máximo de 72 horas disponibles para que profesionales, familias o pequeñas empresas puedan entrar a la subasta.
La inscripción en el Sitme, sistema de transacciones con títulos en moneda extranjera, una subcuenta en la Caja Venezolana de Valores y el registro en el portal de Títulos en Custodia del Banco Central de Venezuela, son quizás las tres condiciones clave que exigen las entidades bancarias.
Unirse a la Bolsa Pública de Valores Bicentenaria también puede forma parte de la lista.
"Los rumores referidos a que los bonos se colocarían en la bolsa socialista corrieron con el último bono de Pdvsa 2022 y aquí no hay requisito que sobre, porque la bolsa la van a usar en algún momento y hay que estar preparado", advierte Fernando Serrano, administrador de empresas y asesor financiero.
La típica carpeta marrón de Cadivi es necesaria para convertirse en inversionista registrado en la Bolsa Bicentenaria.
Los requisitos son copia de la cédula de identidad, del RIF y de un recibo de cualquier servicio, aparte de una referencia bancaria de la cuenta que se vaya a domiciliar para efectuar los pagos. El registro es personal y debe efectuarse en las oficinas de la Torre Europa en horario de oficina.
También es necesario visitar la agencia bancaria para inscribirse en el Sitme y en la Caja Venezolana de Valores.
El proceso consiste en llenar la planilla de afiliación y presentar la copia de la cédula de identidad, el RIF vigente y los datos de la cuenta en el extranjero. Además, en el caso de la Caja Venezolana de Valores se necesita una referencia bancaria y domiciliar una cuenta nacional.
Otras instituciones bancarias exigen estar inscrito en el portal de Títulos en Custodia del BCV. Todos los pasos se realizan online a través de la página http://oncp.extra.bcv.org.ve/, en la que básicamente se anotan los datos personales (nombre y apellido, número de cédula y número telefónico) y un correo electrónico.
Dinero a la vista. Con las últimas convocatorias del bono soberano 2022, el Pdvsa 2017 y 2022, se observó que hubo diferencias entre los puntos exigidos por cada institución bancaria, pero todas y sin distingo de ninguna clase exigieron a sus clientes de manera inmediata el equivalente en bolívares del monto por el que se presentó la orden de compra del bono.
Apartar de una vez el dinero que se espera invertir en los bonos y mantenerlo disponible es imprescindible. Lo más conveniente, de hecho, es decidir desde cuál institución bancaria se hará la compra y depositar allí el dinero en una misma cuenta, o en otras que estén conectadas, para facilitar una rápida transferencia de los fondos.
Serrano reconoce que también hay personas que optan por financiamientos para comprar los bonos, pero advierte que es una operación que requiere hacerse inmediatamente: "Si la disposición es al endeudamiento, tiene que ser un tipo de crédito que se liquide rápido. No vale la pena pedir un crédito con antelación, porque hay incertidumbre con las convocatorias, y no tiene fecha definida".
El monto mínimo de la inversión, en todo caso, es de 3.000 dólares, lo que equivale a 13.029 bolívares, que incluye no sólo el valor de las divisas a 4,30 bolívares cada una, sino también 1% de la comisión que cobran los bancos por el servicio. El máximo, en cambio, no es una cifra estable.
"Las últimas colocaciones nos han dado tendencias. La prioridad son empresas básicas, alimenticias, contratistas de Pdvsa, y es difícil que el Gobierno se desprenda de eso. Para las personas naturales dudo que les asignen más de 10.000 o 12.000 dólares, y en esos márgenes hay que manejarse", calcula el asesor financiero.
Con el bono Pdvsa 2022, el más reciente colocado en el mercado nacional, la máxima asignación para las personas naturales fue de 10.000 dólares (43.000 bolívares), mientras que las empresas que solicitaron divisas para los sectores productivos no prioritarios se le vendió sólo hasta las órdenes de 50.000 dólares, es decir, por un máximo de 215.000 bolívares.
MARGARET LÓPEZ
mjlopez60@gmail.com
Diario El Nacional.
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