lunes, 25 de junio de 2012

Mercados abren la semana en expectativa pero poco optimistas.


La Bolsa de Tokio cerró hoy a la baja una sesión sin grandes incentivos, en la que los inversores se dieron a las ventas para recoger los beneficios cosechados en el arranque de la negociación.

El índice Nikkei bajó 63,73 puntos, el 0,72 por ciento, y quedó en 8.734,62 unidades, mientras que el índice Topix, que agrupa a todos los valores de la primera sección, cedió 5,70 puntos, un 0,76 por ciento, hasta 745,22 enteros.

El sector de la minería lideró las pérdidas, seguido por el de transporte marítimo y el de productos variados, mientras que avanzaron el del caucho, el de pesca y forestal y el de la construcción.
Aunque las compras fueron la tónica inicial en la plaza tokiota tras el tañido de la campana gracias al abaratamiento del yen, que beneficia a los exportadores, las ventas se impusieron por la tarde ante la falta de incentivos para los inversores.

A esto hubo que añadir un ligero encarecimiento hacia el cierre de la sesión del yen frente al dólar, que se movió de la banda media a la baja de las 80 unidades, y al euro, que se depreció desde la franja alta de las 100 unidades hasta la media.

"La negociación fue realmente mediocre hoy. Se puede comprobar la baja participación al ver el escaso volumen de negocio", dijo Hiroichi Nishi, analista de SMBC Nikko Securities, a la agencia Kyodo.

Los inversores optaron en la segunda mitad de la sesión por una actitud de espera de cara a la cumbre de líderes europeos que arranca el jueves y que se presenta como crucial para tratar de atajar la crisis de deuda en la zona euro.

La votación, mañana, en el parlamento nipón del proyecto de reforma fiscal y de la seguridad social, que incluye una polémica subida del IVA, y el futuro del Gobierno del Partido Democrático (PD), que podría perder su mayoría en la Cámara por una posible escisión, también condicionaron los ánimos en el parqué.

En la primera sección cayeron 927 valores, frente a 609 que terminaron al alza y 133 que concluyeron sin variación.

El volumen de negociación fue de 1.386,77 millones de acciones, por debajo de los 1.603,34 millones del viernes. 


El Kospi de Corea del Sur declinó 1,2% a 1.825,38. El índice S&P/ASX 200 de Australia perdió 0,5% a 4.027,80.

Pero el Hang Seng de Hong Kong cedió sus ganancias y bajó 0,5% a 18.897,45 en una serie de altibajos en la inestable jornada.

El índice compuesto Shanghai de China cayó 1,6% a 2.224,11. Las bolsas de Singapur, Taiwan e Indonesia también bajaron. Mientras que las de Malasia, India y Filipinas subieron.



El pesimismo de los inversionistas sobre el estado de la economía mundial predominaba aunque los líderes de Francia, Alemania, Italia y España acordaron en el fin de semana a tratar de lograr un paquete de crecimiento por un valor de 130.000 millones de euros (163.000 millones de dólares ) en la cumbre de la Unión Europea programada para el 28 y 29 de junio en Bruselas.

Otras cumbres en el pasado no han logrado llegar a " situaciones creíbles para la crisis de la eurozona", dijeron estrategas de Credit Agricole CIB, por lo cual "es probable que los mercados se mantengan con ciertos límites antes de la cumbre".

Las acciones europeas bajaban al iniciar la sesión. El índice británico FTSE 100 caía 0,5% a 5.487,56. El DAX de Alemania perdía 1,3% a 6.179,74 y el CAC-40 de Francia declinaba 1,2% a 3.054,09.

Wall Street también parecía encaminarse a una apertura en baja. El contrato a término en el índice industrial Dow Jones bajaba 0,6% a 12.495 y el contrato a término en el S&P 500 perdía 0,7% a 1.317,70.
Las pérdidas se repetían después del cierre de Asia horas antes.

Los inversionistas estaban presionados entre dos situaciones preocupantes, tanto por la desaceleración económica de China, la segunda economía mundial, y la crisis de la deuda en Europa que no parece llegar a su fin.

El contrato de crudo de referencia bajó 48 centavos a 79,30 dólares el barril en transacciones electrónicas en la Bolsa Mercantil de Nueva York. El contrato cerró en 79,76 dólares el barril el viernes.

En los mercados cambiarios, el euro bajó a 1,2503 dólares de 1,2561 al cierre del mercado el viernes. El dólar bajó a 80,07 yenes de 80,45 yenes.

EFE
AP

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