La tasa de desempleo en EE.UU. se mantiene en 9,1%, y los mercados esperan que la Fed se moverá hacia el apoyo a la economía en septiembre, posiblemente con un programa de flexibilización cuantitativa.
En Tokio, el índice Nikkei había caído 1,86%, mientras que con pérdidas muy grandes 4,39% cerró el Kospi en Corea del Sur. En Hong Kong, el índice Hang Seng perdió un 2,87%. En China, el índice compuesto de la Bolsa de Shanghai pierde un 1,89%. mientras que 2,25% fue la caída del mercado en Australia.
En las divisas, el dólar se fortaleció ligeramente hasta ¥ 76,75, mientras que el euro se movió hacia abajo a 1,4162 dólares desde 1,4187 dólares
El precio internacional del petróleo cayó 65 ptos, a 85,80 dólares el barril. En Londres, el crudo Brent bajó también el tipo en 84 ptos, a 111,49 dólares
Las acciones europeas caían con fuerza el lunes presionadas por un descenso
abrupto, a un mínimo de 29 meses, de los papeles de bancos ante nuevos problemas
por hipotecas, temores a una recesión y más evidencia de diferencias políticas
que pueden dificultar una solución de la crisis de deuda de la región.
El índice amplio FTSEurofirst 300 perdía un 2,8 por ciento a 922,08 unidades,
con un volumen correspondiente a un tercio de su promedio diario de 90 días,
mientras que la volatilidad del mercado de acciones subía un 16 por ciento a
46,53.
El índice de acciones líderes de Alemania DAX, en tanto, perdía más de un 4
por ciento a un nuevo mínimo de dos años.
Tras revertir una racha de pérdidas de cinco semanas la semana pasada, el
índice bancario europeo STOXX 600 perdía cerca de un 5,5 por ciento, con lo que
acumula una caída en el año a la fecha de un 33 por ciento tras cuatro meses
seguidos de bajas.
"La posibilidad de una recuperación en el corto plazo sigue siendo débil por
las preocupaciones por la deuda de la zona euro, la reforma estructural y una
demanda por deuda hipotecaria presuntamente vendida inadecuadamente", dijo Manoj
Ladwa, operador senior de ETX Capital.
Las acciones de Royal Bank of Scotland estaban entre las más golpeadas con
una baja de un 10 por ciento, mientras que el diferencial de los swaps por
incumplimiento de crédito a cinco años de su deuda subordinada se ampliaron en
más de 240 puntos base.
El banco es de los más complicados entre los prestamistas europeos que
enfrentan una demanda multimillonaria de reguladores estadounidenses, que los
acusan de tergiversar las revisiones que hicieron de hipotecas antes venderlas
en instrumentos financieros.
Su par alemán Deutsche Bank, también afectado por las decisiones
estadounidenses, fue golpeado por un reporte de la prensa británica que lo
menciona como sujeto de una investigación de la Oficina de Fraudes Graves de
Reino Unido, en relación a bonos respaldados en activos.
Las múltiples preocupaciones por el sector bancario aumentan los miedos de
riesgos de contraparte entre los prestamistas, dijo Andrew Lim, analista de
acciones de bancos de Espirito Santo, refiriéndose a un menor crédito para
algunos bancos europeos de parte de algunos fondos estadounidenses de mercado de
dinero.
"Hay un enorme riesgo en el sistema en este minuto", agregó, citando la
necesidad de expandir el tamaño de un fondo de rescate, mejorando por tanto las
métricas del financiamiento de deuda tanto de deuda soberana como
corporativa.
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