El mercado digiere hoy con
recortes la fuerte inyección de liquidez que ejecutó ayer el BCE
y que dejó bastante fríos a los operadores. Fue algo superior a lo previsto
pero no desató el ánimo alcista, señal de que no todo se arregla con dinero
y de que faltan más catalizadores para que las bolsas empiecen a carburar. Dicen
los analistas que no servirán para activar el crédito, la peor de todas las
noticias pues es ahora cuando la economía de la zona euro –que va de
cabeza a la recesión- necesita de buenas cifras macro y mucha actividad.
Los operadores se mueven también con pies de plomo porque desde Estados Unidos no llegaron buenas noticias. Es cierto que
la revisión del PIB
fue mejor de lo previsto. Pero las conclusiones del Libro Beige de la
FED no gustaron. Y es que el organismo que dirige Bernanke tildara el ritmo de
crecimiento de moderado y advirtiera de que el paro mejora más rápido de lo
esperado. ¿Una buena noticia? Sí, pero no para las bolsas, que
acostumbradas a nadar en liquidez ven muy lejano la tercera oleada de alivio
cuantitativo.
Comenta José Luis
Martínez, estratega en España de Citi, que Bernanke (en una comparecencia
en el Congreso) desconfía del futuro pero no considera que aún en este caso sea
necesario tomar medidas adicionales. “Si en enero su comparecencia sonó
bullish, ayer sonó bearish y con algo de sesgo alcista.”, apunta. Hay más
noticias negativas para el mercado porque en China se ha conocido el PMI
manufacturero de febrero, que sube algo más de lo esperado hasta 51 desde
50.5 de enero. Por tanto, se aleja la posibilidad de que el gigante asiático
suavice algo más su política monetaria.
Con estos ingredientes,
el mercado pliega velas y espera más noticias para intentar la heroica.
Quizás las buenas nuevas puedan venir de la subasta que celebrará hoy el Tesoro y en la que intentará
colocar bonos por hasta 4.500 millones de euros. Tras la subasta de
liquidez a tres años orquestada ayer por el BCE, los expertos esperan una
importante caída de las rentabilidades de la deuda. Es un arma de doble filo
porque si no se produce, la decepción puede ser muy grande. Habrá que estar muy
atentos.
Por último, en el mercado de divisas, el euro perdía posiciones
frente al dólar y al comienzo de la jornada de hoy el cambio entre las dos
monedas se situaba en 1,3313 unidades, tras abrir en 1,3325 unidades.
finanzas.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario