Riesgo e incertidumbre son elementos propios de casi todos los aspectos de nuestra vida, desde los sentimientos hasta nuestras expectativas profesionales y familiares. Las finanzas y las inversiones son, sin duda, uno de los aspectos donde estos elementos tienen mayor preponderancia. Para conocer mejor lo que implica cada uno, y como actuar ante estos factores al momento de tomar una decisión financiera, anexo excelente artículo del Prof. Alfredo Puerta aparecido en el portal http://www.instituto-finanzas.com/blog
¿Cómo lidiar con la incertidumbre y el riesgo?
Vale la pena comenzar, haciendo la distinción entre Riesgo e Incertidumbre. Ambos reflejan el desconocimiento de lo que va a pasar o del resultado a obtener en el futuro, la diferencia radica en que el riesgo es medible. Cuando podemos decir que hay un 30% de probabilidad de pérdida o de ganancia, estamos manejando el riesgo.
El riesgo es manejable, la incertidumbre, no. Debido a esto, Ud. no puede tomar decisiones cuando tiene incertidumbre, ya que no tiene forma de medir el impacto de la decisión. No obstante, cuando tiene posibilidad de medir la potencial pérdida, ahí puede tomar una decisión.
Si manejo con sueño, hay una alta probabilidad de tener un accidente, eso es medible o al menos puedo entender la dimensión del impacto, así que la decisión de manejar o no puede ser considerada; es decir Ud. tiene las cartas sobre la mesa.
La incertidumbre sería como los famosos concursos de premios donde Ud. se para frente a una puerta y se le pide que la abra, no le dicen mas nada, así que Ud. no tiene idea de lo que le pueda pasar, puede ganarse un premio o puede que lo bañen de pintura. En este escenario, no se puede planificar, no se puede tomar ninguna decisión.
¿Qué hacer?
Con Incertidumbre: En primer lugar trate de mantener la calma y busque la mayor cantidad de información posible; no obstante, no tome al pié de la letra, todo lo que dicen en la televisión, en la prensa o en las redes sociales. Esto es, porque muchas veces la información que Ud. necesita no tiene que estar cargada de matices que no le van a aportar mayores beneficios.
La información que recolecte debe permitirle tener una idea del problema y de sus consecuencias; por ejemplo, si se espera que el ejecutivo tome medidas económicas, trate de entender el impacto real para Ud. no para el colectivo, vea que puntos de esas medidas pueden afectarle y hasta qué punto.
Si es posible, vale la pena esperar, no precipitarse, es preferible una decisión tardía que una apresurada. Es por esto, que vale la pena tratar de construir varios escenarios con sus respectivas consecuencias. Imagine que está jugando ajedrez y está pensando varias jugadas adelantadas.
Con riesgo: como Ud. ya sabe lo que le puede pasar, lo más sano es buscar aquella situación que lo favorezca más o por el contrario que lo afecte menos. Lo más indicado es buscar que instrumentos o soluciones le pueden favorecer más; por ejemplo, si el anuncio de medidas económicas que comentábamos anteriormente, implica un aumento de las tasas de interés y Ud. puede determinar que esto tiene un impacto sobre sus ahorros negativo del 20%, lo que hay que hacer es buscar vías para evitar la pérdida o formas de recuperarla, para lo cual Ud. debe informarse de sus opciones, de los instrumentos disponibles en el mercado y de su posibilidad de adquirirlos.
Quizás la estrategia más acertada, sea tratar de convertir la mayor cantidad posible de incertidumbre en riesgo y posteriormente, tomar las decisiones que más le favorezcan.
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