Los activos de riesgo disfrutaron de ganancias a nivel global, en gran medida impulsadas por resultados de beneficios en las compañías estadounidenses que continuaron batiendo las expectativas de los analistas durante el 1er trimestre. El índice S&P 500 cerró en elmayor valor desde junio de 2008.
Los activos de riesgo disfrutaron de ganancias a nivel global, en gran medida impulsadas por resultados de beneficios en las compañías estadounidenses que continuaron batiendo las expectativas de los analistas durante el 1er trimestre. El índice S&P 500 logró marcar un nuevo máximo en el año y el mayor valor desde junio de 2008. En particular, se destacaron los mejores resultados a los previstos en empresas como Exxon Mobile, Microsoft, Dow Chemicals y Procter&Gamble. En tanto, también existió cierto soporte de las declaraciones de Ben Bernanke en la primera conferencia de prensa luego de la decisión del Comité de Política Monetaria, las tendieron a confirmar el escenario de bajas tasas de interés por un período extendido.
Los commodities tuvieron fuertes subas, en particular, los metales preciosos. El oro marcó un nuevo máximo récord mientras que la plata superó el máximo en 30 años alcanzado en marzo.Reserva Federal: una ligera moderación en el tono de las declaraciones respecto al crecimiento. El comunicado del Comité de Política Monetaria de EE.UU. fue esencialmente igual al emitido en el mes anterior: las condiciones justifican tasas de interés excepcionalmente bajas por un extendido período de tiempo y el programa de compra de activos será por USD 600 billones, con las compras completándose a fines de junio, como era ampliamente esperado. Si existió un cambio fue en la descripción de la situación de la recuperación económica, la cual pasó de ser delineada como avanzando en un “ritmo firme” a de ser mencionada como a un ritmo “moderado”. Con todo, el principal mensaje provino de la histórica conferencia de prensa luego de la decisión, la cual pareció reafirmar que no existen apuros por comenzar a normalizar la política monetaria. Los mercados de riesgo le dieron la bienvenida la noticia.
Ben Bernanke comenzó la conferencia de prensa leyendo un resumen del comunicado del Comité y las actualizaciones de las proyecciones sobre crecimiento económico, inflación y desempleo para el período 2011-2013. Los más destacado fue que las proyecciones mostraron un crecimiento económico menor al anteriormente previsto para este año (de un rango del 3,4%-3,9% a y uno del 3,1%-3,3%) e inflación superior a la anteriormente esperada (de un rango del 1,3%-1,7% a uno del 2,1% -2,8%). Sin embargo, existió una mejora en las perspectivas esperadas para el mercado laboral, con la expectativa de que la tasa de desempleo se sitúe en un rango del 8,4%8,7% frente al 8,8%-9,0% que se preveía anteriormente. En sus respuestas a las preguntas de los periodistas, Bernanke tendió a enfatizar que la tasa de desempleo continúa siendo muy alta (con 7.000.000 de puestos todavía perdidos desde el inicio de la crisis) y que es posible que la recuperación sea a un ritmo más moderado a lo anteriormente esperado, a pesar de que en gran medida la FED consideraba que la debilidad del PBI del primer trimestre se debía a factores transitorios (Ver Gráfica de la Semana).
Con respecto a la inflación, el mandatario reafirmó su opinión de que el repunte reciente de las presiones inflacionarias, en una parte importante, responde al efecto transitorio del aumento en el precio del petróleo y otros commodities. En un contexto de desempleo alto en el mercado laboral y significativa capacidad ociosa, en la medida que las expectativas de inflación permanezcan estables, no parecen existir inminentes problemas inflacionarios, según el mandatario. En este escenario, sin embargo, Bernanke remarcó que no existen justificativos para un nuevo programa decompra de activos, aunque tampoco esperaba que por un par de comités adicionalesexistiera alguna medida de normalización (existió la reafirmación de que la Reserva Federal continuará reinvirtiendo los intereses de los activos actualmente en cartera, lo cual no debería permitir al balance contraerse).
Finalmente, indagado sobre su opinión sobre la rebaja de la perspectiva de la deuda de EE.UU. el mandatario expresó su esperanza de que sirva de impulso para que se concreten reformas que intenten abarcar estos desafíos de largo plazo. También, expresó que en la medida de que la política fiscal más restrictiva afecte alguno de los objetivos del mandato de la FED, esta acomodará la política monetaria. En este punto, parece claro que la autoridad monetaria está dispuesta a retrasar la normalización de la política monetaria si se acentúa la caída en el apoyo de la política fiscal, todas las demás condiciones permaneciendo constantes. El mercado espera que el primer aumento de tasas ocurra a mediados de 2012. En nuestra opinión, es probable que este paso suceda antes, si bien los eventos de esta semana parecen sugerir que para la Reserva Federal las condiciones actuales nojustifican un cambio cercano en las políticas y que en gran medida dependerá de la evolución de las expectativas de inflación.
Reducción de la calidad crediticia de la deuda soberana de Japón y de las estimaciones de expansión del PBI. El martes, la consultora S&P redujo la perspectiva del rating de la deuda de la tercera economía mundial de “estable” a “negativo” (la calificación actual es de AA-), citando que los costos de reconstrucción de las zonas devastadas pueden deteriorar todavía más los altos niveles de endeudamiento que enfrenta el país. S&P estimó que los gastos de reconstrucción podrían alcanzar los 50 trillones de yenes, con su estimación central siendo de 30 trillones de yenes. Esta situación requerirá un mayor nivel de endeudamiento, si no se realizan ajusten fiscales, llevando al la deuda neta al 145% del PBI para 2013, desde una estimación preliminar del 137%.
Los eventos conocidos en la semana confirmaron que el impacto del terremoto y tsunami de Japón parecen estar siendo mayores a los inicialmente previstos. Las ventas minoristas cayeron el máximo en 11 años durante marzo, mientras que la producción industrial tuvo una caída de poco más del 15% durante el tercer mes del año, la mayor contracción histórica. En este escenario, el Banco Central de Japón recortó las proyecciones de crecimiento económico del país a 0,6%, desde el 1,6% previo (en los 12meses cerrados enmarzo de 2012).
Los índices bursátiles de Japón, sin embargo, lograron subir en el contexto de estas noticias, sugiriendo que las noticias negativas, en gran medida, ya han sido descontadas. Mirando hacia los próximos meses, subsisten algunas dudas sobre el impacto a nivel corporativo que pueda tener esta situación en empresas internacionales, las cuales están vinculadas a Japón a través de sus ventas y/o el suministro de insumos en los próximos dos trimestres. Hasta el momento, sin embargo, los resultados corporativos de las empresas de EE.UU. han mostrado un escaso impacto de esta situación en el primer trimestre y moderadas preocupacionessobre el futuro, en la medida que la caída de ventas en Japón no resultan tan relevantes para las compañías y/o los problemas de suministros de insumos se abastecen con inventarios o alternativas similares.
El PBI de EE.UU. se expandió a un ritmo del 1,8% durante el primer trimestre del año, luego del incremento del 3,1 del último trimestre del 2010, algo por debajo de lo esperado por elmercado. Sin embargo, los detalles del reporte mostraron un comportamiento del consumo doméstico mejor al previsto (2,7%). Asimismo, buenaparte del menor crecimiento respondió a la caída del gasto gubernamental y a cierto debilitamiento del aporte de las exportaciones netas, los cuales en gran medida parecen ser elementos transitorios. Un segmento que mostró debilidad y que es probable que tenga una recuperación mucho más lenta fue el de inversión residencial.
Con todo, el reporte arrojó cierto optimismo respecto a la evolución que pueda tener la economía en los próximos trimestres, donde el escenario más probable en virtud de los recientes datos económicos mensuales parece ser el de una aceleración del crecimiento. En particular, el mercado laboral parece estar mejorando a un mejor ritmo que en último trimestre de 2010 y comienzos de 2011.
Asimismo, el consumidor no parece estar siendo tan afectado por los altos precios de la gasolina, como mostró el incremento de las ventas minoristas de marzo. La confianza ha cedido algo, pero no a niveles alarmantes. En cuanto a la inversión empresarial, el último reporte de bienes duraderos mostró un registro mejor al esperado y confirmó que la tendencia positiva se mantiene en la inversión en capital. En la medida que se recupera el mercado laboral,parece posible que las empresas se encuentren más dispuestas a continuar invirtiendo en tecnología y equipamiento, en un contexto donde las condiciones financieras continúan siendo muy laxas. Finalmente, posiblemente, las exportaciones netas vuelvan a aportar positivamente al crecimiento en un marco de intensa depreciación del dólar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario