Gran Esfuerzo para salvar a Grecia.
Aún faltan los detalles oficiales y la versión definitiva, pero el esfuerzo para salvar a Grecia es titánico y la inyección monetaria sin precedentes. Así, el segundo programa de rescate para Grecia ascenderá finalmente a unos 109.000 millones de euros de aportaciones públicas, mientras que el sector privado aportará 106.000 millones hasta 2020, de los que alrededor de 37.000 serán contribución voluntaria y 12.600 recompra de títulos.
Dijo Sarkozy que esto lo hacen por Grecia, pero por ningún país más, lo que viene a significar que no habrá segundas oportunidades para quien no cumpla con sus deberes. Aviso para navegantes. Lo que si descuentan con claridad las compras de los inversores es que los líderes comunitarios han afrontado los problemas de liquidez y solvencia de Grecia, además del riesgo de contagio a otros países, fundamentalmente España e Italia.
Los analistas de Renta 4 valoran estos anuncios y consideran que los acuerdos van en la buena dirección para dar una solución más estructural a los problemas de la deuda europea. Pero recuerdan que faltan por ver los detalles y la implementación para que haya un efecto duradero en las bolsas. Javier Flores, analista de Dracon Partners Eafi, apunta en la misma dirección cuando explica que, si se cumple lo pactado, “podemos ser optimistas sobre las medidas adoptadas, pero aún existe riesgo de ejecución”.
En definitiva, el mercado ha recibido de muy buen grado el paquete global, pero ahora quedan los detalles y el cumplimiento, algo que las bolsas necesitan como agua de mayo para consolidar la recuperación.
Dijo Sarkozy que esto lo hacen por Grecia, pero por ningún país más, lo que viene a significar que no habrá segundas oportunidades para quien no cumpla con sus deberes. Aviso para navegantes. Lo que si descuentan con claridad las compras de los inversores es que los líderes comunitarios han afrontado los problemas de liquidez y solvencia de Grecia, además del riesgo de contagio a otros países, fundamentalmente España e Italia.
Los analistas de Renta 4 valoran estos anuncios y consideran que los acuerdos van en la buena dirección para dar una solución más estructural a los problemas de la deuda europea. Pero recuerdan que faltan por ver los detalles y la implementación para que haya un efecto duradero en las bolsas. Javier Flores, analista de Dracon Partners Eafi, apunta en la misma dirección cuando explica que, si se cumple lo pactado, “podemos ser optimistas sobre las medidas adoptadas, pero aún existe riesgo de ejecución”.
En definitiva, el mercado ha recibido de muy buen grado el paquete global, pero ahora quedan los detalles y el cumplimiento, algo que las bolsas necesitan como agua de mayo para consolidar la recuperación.
Para lo que resta del día, la agenda macro estadounidense viene completamente vacía, por lo que los resultados y las noticias o rumores que puedan trascender sobre Grecia marcarán el paso del mercado.
Los esfuerzos por elaborar un amplio acuerdo de reducción del déficit en 3 billones de dólares ganaron fuerza el jueves, mientras la Casa Blanca y legisladores de alto rango se apresuran por superar a otras opciones y evitar una devastadora moratoria de Estados Unidos.
Mientras se aproxima el plazo del 2 de agosto para elevar el límite de deuda de Estados Unidos, el presidente Barack Obama y el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, trabajaron en búsqueda de un plan de presupuesto que incluiría profundos recortes al gasto, pero que podría dejar una reforma tributaria para más adelante, dijeron asesores del Congreso.
El principal obstáculo sigue siendo el tema de las alzas de impuestos que los demócratas de Obama quieren y a los que se oponen los republicanos. Hubo reportes conflictivos sobre cómo y cuándo podrían discutirse los mayores ingresos, y la Casa Blanca prometió que no habría acuerdo sin ello.
La atención está principalmente en la posibilidad de lo que fuentes del Congreso dijeron es un plan de recorte del déficit en 3 billones en un plazo de 10 años que está tomando forma, una cifra que muchos en Washington esperan que ayude a salvar la calificación de deuda triple A de Estados Unidos.
Fuente.
Finanzas.com.
Reuters.
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